Quería comprarle un tanga a su mujer y se hizo rico.

Dicen que con la vergüenza, ni se come ni se almuerza. Pero este no es el caso. A Roy Ramond le gustaba regalarle a su mujer algo de lencería sexy de vez en cuando. Pero tenía un problema. Sentía una vergüenza infinita cada vez que entraba en una tienda para buscar un conjunto bonito. ¿No

¿En qué se parece un copywriter a un neurocirujano?

De los grupos de WhatsApp ya he hablado alguna vez en los emails que mando a mis suscriptores. Lo digo por si no eres suscriptor y no lo sabes. La verdad que dan para mucho. A lo mejor te pasa como a mí. Tengo grupos de todo tipo, tamaño y colores: El de la familia,